Un trocito
de Sevilla
a Madrid fue
trasplantado
y fue tan
bien abonado
que germinó
la semilla.
Hoy es una
maravilla
de gran
renombre mundial,
con su
gracejo cordial
en cualquier
lugar del mundo
se escucha
el eco profundo
de su verso
universal.
Es Isabel Díez Serrano
gran poeta y
gran señora
talante de
soñadora
y espíritu
sevillano.
A todos
brinda su mano,
de su
experiencia bebemos
y es de la
que aprendemos,
en su tertulia
mensual
de la gran
Villa Real,
lo mucho que
no sabemos.
El trabajo
de Isabel
tan extenso
y tan prolijo
estoy seguro
y es fijo
que brilla
cual oropel.
Cuando lo
vuelca al papel
pone tanto
sentimiento
que en su
temblor va el lamento
de la mujer
andaluza
y con su voz
nos endulza
el verso en
cada momento.
Galardones
en su mano
atestiguan
su historial,
viviendo en
El Escorial
recibe uno
mexicano.
Elogia el
país hermano
su léxico y
su oratoria,
por ser fiel
a la memoria
el Vasconcelos
le han dado,
gran premio
muy valorado
para añadir
a su historia.
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